Este premio, que trata de recompensar y honrar a personas físicas, jurídicas o morales que hayan realizado una extraordinaria labor humanitaria, cultural o educativa en beneficio de mujeres africanas y de fomentar una mayor atención y sensibilidad hacia los derechos y la igualdad de la mujer, lo ha concedido Harambee-España en esta edición a la costamarfileña Christiane Kadjo.
Christiane Kadjo es una marfileña políglota con estudios de Filosofía, licenciada en Ciencias Empresariales y Comercio, que ha trabajado en empresas de Costa de Marfil y de París y en organismos financieros internacionales como el BICICI (Banque Internationale pour le Commerce et l’lndustrie de la Cote d’lvoire), donde ha ocupado cargos de responsabilidad. Sin embargo, decidió abandonar su carrera profesional, para dedicarse a la enseñanza, formación y promoción de las mujeres marfileñas, creando, junto a otros compatriotas, la ONG “Education et Développement”, dedicada fundamentalmente a la formación y promoción de la mujer.
FORMACIÓN PROFESIONAL PARA LA MUJER MARFILEÑA
Christiane nos explica que su país acaba de pasar por una crisis sin precedentes desde su independencia en 1960 que ha desembocado en una terrible guerra este mismo año. Al comenzar la inestabilidad política que durante 10 años ha mantenido a su país en un ambiente de violencia y pobreza, su ONG agregó a los programas ya en marcha, proyectos de asistencia especifica a las mujeres desplazadas por la guerra que habían perdido a sus padres y maridos y que no tenían recursos de ningún tipo.
La primera iniciativa de la ONG fue crear el centro Yaraní en Abidjan con programas de formación profesional académica y de formación profesional express. Pronto inició otra escuela similar; Okassou, en Yamoussoukro, capital política de Costa de Marfil. Los dos centros han quedado seriamente dañados en la guerra pero lo peor es que las batallas recientes en Abidjan han dejado muchas familias abandonadas y sin alojamiento. Todos los días reciben peticiones para encargarse de chicas que no tienen a dónde ir y que ella y sus colaboradores de dirección están empeñados en sacar adelante.
LA MUJER PRINCIPAL VÍCTIMA DE LA GUERRA
«Después de varias tentativas de golpe de estado, en 2002 se produjo una rebelión que dividió el país en dos y que desembocó en la guerra de 2011, con grandes perjuicios tanto económicos como sociales».
«Las bandas armadas (algunos de sus miembros todavía no han sido desarmados) entraban en las casas, mataban a las personas, se apropiaban de los bienes y de la casa misma; se cerraron las escuelas de los barrios periféricos de la capital, especialmente en «Abobo» de más de 2 millones de habitantes (donde está la escuela profesional Yarani) y»Yopougon» (segundo barrio más poblado donde solemos organizar actividades extraescolares para chicas de familias sin recursos); personas desplazadas en campos de refugiados diseminados en la ciudad… En esta situación, la mujer ha sido la víctima principal, por una mentalidad que todavía privilegia a los hombres en referencia a la educación. Tienen dificultades para sostenerse con un trabajo remunerado o con actividades de lucro; con un aumento del riesgo y de la práctica de la prostitución como única forma de sostenimiento; y por tanto la proliferación de enfermedades contagiosas: Sida, E.S.T… Miles de mujeres que han perdido a sus padres y maridos en la guerra viven hacinadas en las dos capitales principales del país sin ningún futuro a la vista.»
20 AÑOS DEDICADA A LA PROMOCIÓN DE LA MUJER
Lo que empezó como un sueño en el 92 es hoy una gozosa realidad con nombre y apellidos. Christiane nos habla de jóvenes empresarias que han emprendido pequeños negocios después de un año de formación en técnicas de gestión de empresas, de mujeres que han cambiado su vida al pasar por Yarani, y de alumnas que estudian en sus centros como:
…Esmone viene de Bangolo; su padre se había retirado allí y vivía del cultivo de productos en una plantación. Al estallar la guerra, los rebeldes les confiscaron todo: casa, campos, coches, muebles. Tuvieron que huir y refugiarse en Abidjan, ella salió corriendo con su hermano pequeño a la espalda, bajo la mirada de su madre que les despedía, en la desolación, sin saber nada de su futuro. Gracias a Dios, se volvieron a encontrar algunos meses más tarde. Ya conocía la escuela Yarani y se dirigió allí en busca de ayuda. Ahora vive en el internado, y estudia para obtener un diploma y ayudar a su familia que de momento carece de lo más necesario.
…Desirée es originaria de Bangolo, su familia, protestante, al empezar los bombardeos, tuvo que huir a otra ciudad, Daloa, menos peligrosa, su madre ha fallecido hace poco y son 6 hermanos. Le hemos conseguido una beca de la empresa TATA para el ciclo BT y vive en el internado. Sabe que dentro de dos años cuando termine sus estudios podrá mantener a su familia.
…Sara es de Danané, una de las ciudades más afectada durante la guerra porque colinda con la frontera oeste donde se refugiaron muchos rebeldes que iban destruyendo sistemáticamente casas y campos. Su padre tuvo que huir de casa cuando estalló la guerra y desde entonces está refugiado en Abidjan, sin trabajo. Su madre falleció el año pasado de paludismo por falta de atención médica. Vive en el internado e iniciará el segundo año de formación profesional. Es consciente de que, de no haber tenido esta oportunidad, sería una más de las chicas que no tienen ninguna perspectiva de un futuro digno y seguro.
Okassou y Yamassoukro, dos centros de la ONG que dirige, necesitan ser ampliados para acoger a tantas chicas víctimas de la guerra.
Además de las alumnas que hacen formación profesional académica para lograr un título como técnico de hostelería. auxiliar de clínica o experto en elaboración y seguimiento de proyectos, hay numerosos cursillos cortos para proporcionar a muchas mujeres herramientas con las que ganarse la vida sin tener que vender su dignidad y para elevar su autoestima y hacerles conscientes de su propia dignidad. Junto a cursos de pastelería, cocina. tejidos. nutrición, costura, gestión económica, etc., hay clases sobre higiene. derechos humanos, igualdad de género, alfabetización, prevención del Sida o algo tan sencillo como fabricar jabón.
Christiane Kadjo visita España para recibir el Premio Harambee «Comunicar África» a la Igualdad y Promoción de la Mujer Africana con la confianza de que la generosidad de los españoles le ayudará a reconstruir sus maltrechas instalaciones tan dañadas por la guerra y a facilitar becas para que puedan formarse muchas otras chicas y mujeres y poder salir del círculo vicioso de pobreza en el que se encuentran.
Se puede ayudar donando cualquiera de estas cantidades
5€/mes: Seguro de salud para una niña
10€: Manutención
20€: Transporte
30€: Material escolar
50€: Pago de profesorado
80€: Alfabetización de una mujer adulta
153€: Beca de un año de formación técnica
270€: La pensión alimenticia anual de una chica interna
405€: La carrera de dos años de Formación Profesional
mediante una transferencia bancaria a nombre de la Asociación Harambee en
c/c de Harambee de
La Caixa: 2100 3059 97 2200859916
Concepto: Costa de Marfil
Entidad declarada de utilidad pública: 15 de octubre de 2010.
Certificado de las donaciones: Asociación Harambee.